Tras las elecciones legislativas porteñas, el Gobierno nacional retomará este jueves una de las iniciativas más esperadas por el mercado: la posibilidad de utilizar dólares no declarados —los que los argentinos guardan fuera del sistema financiero— para la compra de bienes sin necesidad de justificar su origen.
Según estimaciones de organismos oficiales y consultoras privadas, los argentinos atesoran entre 250.000 y 400.000 millones de dólares fuera del circuito formal. El Ejecutivo busca que una parte de esos fondos se vuelque a la economía real mediante operaciones como la compra de propiedades, automóviles o bienes durables.
El presidente Javier Milei confirmó que la medida se encuentra en etapa avanzada de coordinación entre la Agencia Federal de Ingresos Públicos (ARCA), el Ministerio de Economía y el Banco Central. “Lo que nosotros estamos trabajando, entre ARCA, Ministerio de Economía y el Banco Central, es que usted pueda gastar esos dólares y nadie lo moleste. Entonces, usted va, se quiere comprar, no sé, una casa de US$200.000, va con los crocantes y nadie le tiene que preguntar nada», aseguró el mandatario en una entrevista reciente con el canal LN+.
El objetivo oficial es facilitar el uso de moneda extranjera en transacciones sin someter a los ahorristas al régimen de fiscalización tradicional. En esa línea, Milei remarcó que cada ciudadano podrá usar “los dólares o la moneda que quiera para todo lo que quiera”.
No obstante, aclaró que los impuestos correspondientes a las operaciones deberán seguir abonándose en pesos.
La iniciativa apunta a dinamizar sectores clave como el inmobiliario y el automotor, además de incentivar el ingreso de divisas al circuito formal sin necesidad de implementar un blanqueo con beneficios fiscales.