La Confederación General del Trabajo (CGT) anunció la convocatoria a un paro general de 24 horas para el próximo jueves 10 de abril, en rechazo a las políticas económicas del gobierno de Javier Milei. Se trata de la tercera huelga general en lo que va de la gestión del actual presidente.
Tras una reunión del Consejo Directivo que se extendió por más de tres horas, la central sindical resolvió una serie de medidas de protesta, que incluyen movilizaciones previas y el acompañamiento a los sindicatos que participen en distintas manifestaciones. Como parte del plan de acción, la CGT se sumará a la marcha del 24 de marzo organizada por los organismos de Derechos Humanos en conmemoración del Día de la Memoria, Verdad y Justicia.
Asimismo, el miércoles 9 de abril se llevará a cabo una movilización masiva hacia el Congreso de la Nación junto a jubilados, como parte de la jornada de protesta que culminará con el paro general del día siguiente. «Serán 36 horas de acción y medidas de protesta», indicaron fuentes sindicales.
El impacto en el transporte público será significativo, ya que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) confirmó su adhesión a la huelga, lo que provocará la suspensión del servicio de colectivos en todo el país. Se espera también que otros gremios del sector, como los ferroviarios, se sumen a la medida, afectando el funcionamiento de trenes y otros medios de transporte.
Desde el gobierno minimizaron la convocatoria y cuestionaron la decisión de la CGT. El vocero presidencial, Manuel Adorni, calificó la medida como «un intento de los líderes sindicales de perjudicar al gobierno», y afirmó que el Ejecutivo continuará con su agenda de reformas económicas pese a las protestas.
El paro del 10 de abril se suma a un clima de creciente tensión entre el gobierno y los sindicatos, en un contexto de ajuste económico y reformas impulsadas por la administración de Milei.