Fuerza Patria retuvo todas las bancas que ponía en juego y sumó cinco más. Desde diciembre contará con 39 diputados y 24 senadores, lo que le devuelve el quórum propio en la Cámara alta tras seis años. La Libertad Avanza y el PRO consolidaron un bloque opositor fuerte, mientras que otras fuerzas lograron representación menor.
El peronismo bonaerense obtuvo un triunfo clave en la elección legislativa: no sólo retuvo las 29 bancas que ponía en juego, sino que sumó cinco más —dos en Diputados y tres en el Senado— y garantizó desde diciembre una mayoría propia en la Cámara alta, algo que no lograba desde 2019.
En Diputados, el bloque oficialista Fuerza Patria pasará a tener 39 escaños. En el Senado, alcanzará 24 de los 46 lugares, con quórum automático y a solo siete votos de los dos tercios. El recambio implicará el ingreso de 21 nuevos diputados y 13 senadores.
La Libertad Avanza, en alianza con el PRO, consiguió 18 diputados y 8 senadores, lo que le permitirá reunir 30 bancas en la Cámara baja y 14 en la alta. Otros espacios también lograron representación: Somos Buenos Aires colocó 2 diputados y 2 senadores, Espacio Abierto Hechos 3 diputados, y el Frente de Izquierda retuvo sus 2 escaños en Diputados.
Entre los nombres destacados que asumirán figuran Mayra Mendoza, Mariano Cascallares y Facundo Tignanelli en Diputados, mientras que en el Senado ingresarán Gabriel Katopodis, Malena Galmarini y Fernanda Raverta, entre otros referentes de peso del oficialismo.
Con este resultado, el peronismo provincial consolida su control legislativo y queda en una posición favorable para acompañar la gestión de Axel Kicillof en la segunda mitad de su mandato.