El estado peruano lo ratificó de forma definitiva a través de la eutanasia de Ana Estrada, una mujer de 43 años que se convertirá en la primera persona en ser autorizada a poner fin a su vida en ese país.
La solicitante de la primera eutanasia es una activista que padece polimiositis incurable y progresiva desde los 12 años. El fallo tuvo lugar después de que un juez del Tribunal Supremo, dirimiente hasta ahora, cambiara de postura y permitiera resolver el caso de manera definitiva, al alcanzar los cuatro votos necesarios, informó la agencia Europa Press.
«Juez supremo dirimente Carlos Calderón Puertas se suma a la posición mayoritaria de los magistrados respecto al protocolo de actuación médica, en el recurso de consulta del proceso de amparo seguido por Ana Estrada, y resuelve de manera definitiva el caso», informó el organismo judicial en su cuenta de Twitter.
«La resolución será notificada en los próximos días, debido a que aún está en proceso la redacción final de la sentencia y la firma de los jueces intervinientes», comunicó el Poder Judicial, según el diario La República.