El director del Registro Civil de Santa Fe, Sergio Duarte, advirtió que la provincia podría cerrar el 2025 con una tasa de crecimiento vegetativo negativa, es decir, con más defunciones que nacimientos. De concretarse, sería la primera vez que ocurre un fenómeno de estas características en la historia santafesina.
“En los últimos años estamos registrando aproximadamente 2.000 nacimientos menos por año”, detalló Duarte, y señaló que recién en diciembre se podrá confirmar la tendencia con datos consolidados. “Es muy posible que este año entremos en lo que estadísticamente se llama tasa negativa”, anticipó.
La caída de nacimientos no es un fenómeno aislado, sino parte de una tendencia global. “Es algo muy marcado en Occidente, pero en Argentina se acentuó mucho más en los últimos años”, explicó el funcionario.
Los números reflejan con claridad el retroceso. En Rosario, se pasó de 23.631 nacimientos en 2017 a 16.322 en 2024, lo que representa una reducción de casi 7.000 bebés. A nivel provincial, la situación es similar: en 2017 se registraron cerca de 57.000 nacimientos, mientras que en 2023 la cifra cayó a 41.000. Entre 2013 y 2023, la provincia acumuló una baja de 33.000 nacimientos.
Respecto a las causas, Duarte sostuvo que se trata de un fenómeno “multicausal”. Entre los factores más relevantes mencionó “aspectos socioculturales, el cambio en la inserción de la mujer en el mercado laboral y las dificultades económicas y habitacionales”. “Todos sabemos lo que cuesta ser papá o mamá en este país”, concluyó.