El tren que conecta General Guido con Divisadero de Pinamar dejará de funcionar a partir del 1 de abril, según confirmó Trenes Argentinos. La empresa justificó la medida alegando “cuestiones de seguridad operacional”, aunque detrás de la decisión subyace un ajuste en el sector ferroviario.
La suspensión del servicio ha generado preocupación en usuarios y sectores vinculados al turismo y la economía regional, que dependen del ferrocarril como medio de transporte accesible. La medida se enmarca dentro de la declaración de “Emergencia Ferroviaria” por parte del gobierno de Javier Milei, bajo la cual se han recortado inversiones y servicios en distintas líneas del país.
El cierre del tren a Pinamar recuerda el proceso de desmantelamiento ferroviario ocurrido en los años 90, cuando la privatización y el ajuste estatal dejaron fuera de servicio a numerosos ramales, afectando a comunidades enteras. Hoy, la falta de mantenimiento y la reducción de fondos ponen nuevamente en jaque la continuidad del servicio.
Organizaciones locales y usuarios del tren han manifestado su preocupación y han solicitado a las autoridades una revisión de la medida, advirtiendo sobre el impacto negativo que la cancelación del servicio tendrá en la conectividad y el desarrollo de la región.