A sus 95 años, María de las Mercedes «Porota» Colás de Meroño, vicepresidenta de Madres de Plaza de Mayo, falleció en el día de ayer.
«Ella era una de las Madres que había pasado dos veces por la tortura y el horror», escribió tras su partida Hebe de Bonafini en el texto titulado «Porota cambió de casa».
Nació en Villa Devoto, en 1925, y emigró con su familia a España. Su padre, José María Colás, era albañil y anarquista, y por eso perseguido por la dictadura de Uriburu, por lo que decidieron irse del país hacia Lodosa, un pueblo de Navarra, España.
De nuevo en Argentina, ya casada con Francisco Meroño y con una única hija, Alicia Meroño, el terrorismo de Estado volvió a golpear la vida de Porota. El 5 de enero de 1978, cuando tenía 31 años, Alicia fue secuestrada y desde entonces está desaparecida.
María de las Mercedes participó cada jueves de la tradicional marcha de las Madres de Plaza de Mayo y dejó una frase que la marcó a fuego: «Acá no se viene a llorar, se viene a luchar».