La odisea de los jóvenes para independizarse en Argentina se profundizó en 2024.
Las dificultades para independizarse en los jóvenes entre 25 y 35 años ha tenido un aumento en los últimos meses. Un informe de la Fundación Tejido Urbano mostró que un 40% de esta franja etaria aún convive con sus familias, por la imposibilidad de acceso de una vivienda propia y de cubrir los costos tanto de alquiler como de los servicios.

A su vez, los datos reflejan que el 60% de aquellos que habían logrado emanciparse volvieron a la casa de sus familias, debido a la crisis económica y la desregulación de los alquileres. La problemática tuvo un mayor desarrollo durante los últimos años, ya que la brecha entre el aumento de salarios y alquileres tuvo un sostenido crecimiento.


Además,7 de cada 10 inquilinos que firmaron sus contratos recientemente tienen aumentos mensuales o cada 4 meses. Por su parte, el titular de la Federación de Inquilinos Nacional, Gervasio Muñoz, aseveró que “entre junio y septiembre creció la cantidad de personas que dejó la vivienda por no poder pagarla”.
Por otro lado, en la última Encuesta Permanente de Hogares de la INDEC, los resultados indicaron una baja en la tasa de propietarios y la tasa inquilinos durante el primer semestre del 2024.
En un contexto donde el 52% de las personas viven debajo de la línea de la pobreza y los salarios no se equiparán al aumento de los gastos de vida, se presentan mayores dificultades para independizarse, y aquellos que logran acceder a un alquiler destinan la mayor parte de su sueldo para pagarlo.
Sin embargo, la profundización de la problemática de acceso a la vivienda, no es el único reto que deben enfrentar las nuevas generaciones. Otros aspectos a tener en cuenta son las transformaciones en las dinámicas laborales y el impacto de las nuevas tecnologías tanto en lo académico como profesional.